Destrucción de la Historia

Cada vez me doy cuenta de que somos gobernados por una bola de ignorantes. ¿Por qué lo digo? ¿Acaso nuestros "gobernates" no son un hombres ilustrados? ¿Los gobernadores de los estados no pasaron por la escuela? Pues si es así, lo ocultan bastante bien.

Esto viene a colación por un artículo que leí en La Jornada en el que los custodios de la zona arquelógica del Tajín denuncian que durante la última Cumbre Tajín en este año fue dañada -por no decir cabronamente madreada- una cabeza de serpiente en bajorrelieve en un juego de pelota. Además de que denuncian también que el Templo de los Nichos -y le digo templo ya que en México no existen pirámides por la sencilla razón de que geométricamente hablando ningún templo prehispánico tiene forma piramidal como en Egipto- tiene una grieta que ya se ha extendido 30 metros y que fue ocasionada al montar el láser en la primera cumbre del 2000.

Desafortunadamente esto no es nuevo, para poner un ejemplo reciente cuando el gober ¿galán? del Edomex, Peña Nieto, autorizó un espectáculo de luz y sonido en Teotihuacán también fue dañado el Templo del Sol, afortunadamente algunos legisladores con un poco de sentido común (eso es raro) levantaron la voz y el proyecto se pospuso.

Y no se si recuendan también la polémica que se armó cuando Thalía se tomó una sesión fotográfica en Chichen Itza -cuando está prohibido- por influencias de su hermana quien es funcionaria del INAH.

Casos como esos hay por montones, a los que viven en el DF y sobre todo en el sur no se si hayan notado que en el parque ecológico Peña Pobre en Insurgentes Sur y San Fernando han notado que existe un cerro dentro de dicho parque. Bueno, pues resulta que ese "cerro" es un un templo de igual o mayor tamaño que la "pirámide" de Cuicuilco, el cuál no se ha rescatado y ¿saben por qué? Pues porque cuando se hizo la ampliación de Insurgentes tuvieron que dinamitar un buen cacho para poder hacer la avenida.

Y precisamente en esa misma zona a un lado de Villa Olímpica existen al menos 3 templos, pero qué creen? uno tiene encima una de las horrendas esculturas que se erigieron para las olimpiadas del 68 y los otros dos son parte del terreno de un club.

Lo mismo que en el Parque de Peña Pobre sucedió en San Pedro de los Pinos, en la calle Pirámide entre Periférico y San Antonio existe otro templo el cual también fue mutilado para dar paso al Periférico.

Estos casos son sólo la punta del iceberg, sólo para no hablar del saqueo y destrucción que se realiza en prácticamente todas las zonas arquelógicas de la república con consentimiento o negligencia de las autoridades. No es nada nuevo, los arqueólogos tienen años denunciándolo sin que nadie mueva un dedo.


Y así nos podríamos seguir con muchísimos ejemplos de descuido, neglicencia, corrupción e impotamadrismo -sí, ya se que no existe la palabra, pero no encuentro otra forma de decirlo- de las autoridades del INAH, bien dicen que no tiene la culpa el indio sino él que lo hace compadre. Cada que se da un caso de estos el INAH hace mutis por lo que se convierte en cómplice de la destrucción del Patrimonio Nacional.

¿En manos de quienes está la memoria histórica de este país? Pues por lo que se ve en manos de una bola de incultos y corruptos funcionarios que por una "mochada" se hacen de la vista gorda ante este atentado a la Nación.

Recordemos que en el territorio que hoy es México florecieron la inmensa mayoría de las culturas más avanzadas del continente y del mundo entero, o sea que esta destrucción no sólo afecta a este país sino a todo el mundo.

Es una pena -por decir lo menos- que suceda esto. Es una pena que mejor estudiosos de otros países (recordemos que zonas cómo Teotihuacán y mayormente las de la zona maya han sido descubiertas e investigadas por extrajeros) le den más valor a nuestra cultura que nosotros mismos.

Tal vez sea aventurado decirlo, pero considero que esa es una de las causas por las cuales los mexicanos no progresamos. Si no somos capaces de valorar nuestro pasado que podemos esperar de nuestro futuro?

Imágen propiedad de La Jornada. Que conste!